¿Por qué las gafas limitan o impiden la práctica de algunos deportes?
El uso de gafas correctoras puede ser muy limitante e, incluso, impedir la práctica de algunos deportes, especialmente los de contacto, los de riesgo y los acuáticos. La normativa de algunos deportes no permite jugar con gafas por el riesgo que entraña tanto para el deportista que las usa, como para sus compañeros y contrincantes. Un golpe en un lance fortuito en una persona que lleva gafas puede ser muy peligroso, puesto que los cristales o las monturas pueden llegar a clavarse en los ojos o en el rostro, con consecuencias graves para la estética y, sobre todo, para la vista de los deportistas involucrados en este tipo de situaciones.
Uso de gafas y lentillas y rendimiento deportivo
El uso de gafas correctoras, y también de lentes de contacto, afecta negativamente al rendimiento en el deporte. Esta es una opinión generalizada en la mayoría de deportistas, tal y como se aprecia en un estudio sobre esta cuestión, cuyas conclusiones pueden consultarse en este post.
Los principales impedimentos y molestias del uso de gafas graduadas al practicar deportes son:
- El peligro de sufrir daños tras un golpe en las mismas, especialmente en prácticas de contacto o de velocidad.
- Imposibilidad de usarlas en deportes acuáticos o relacionados con el agua: natación, buceo, vela…
- Se pueden caer al suelo fácilmente y romperse.
- Crean dificultades y hasta impiden el uso de gafas de protección frente a los efectos del sol o de la nieve y los golpes.
- Son molestas y pueden caerse con facilidad al realizar movimientos bruscos.
- No siempre permiten una visión óptima desde todas las distancias.
- La propia montura de las gafas pueden distorsionar la visión o producir distracciones.
- En determinadas circunstancias pueden producirse deslumbramientos y/o destellos.
- Las gafas no siempre garantizan un buena visión en todo tipo de circunstancias y condiciones de iluminación.
Por todo ello, las gafas correctoras pueden llegar a limitar enormemente la práctica deportiva, impidiendo rendir al máximo de su potencial.
En ciertos casos, el uso de gafas se vuelve totalmente incompatible con la práctica de algunos deportes. Entonces, al deportista no le queda otro remedio que buscar alternativas, si no quiere tener que renunciar a la práctica de su deporte preferido.
La alternativa de la cirugía refractiva
La cirugía refractiva es una interesante y eficaz alternativa al uso de gafas y lentes de contacto para corregir los problemas de visión de las personas con miopía, hipermetropía y/o astigmatismo. En la mayoría de casos, tras una intervención de este tipo, que suele realizarse mediante técnica Lasik, ya no es necesario el uso de gafas y lentillas para ver bien desde cualquier distancia.
Además, la recuperación es muy rápida y, por regla general, en unas semanas la persona operada ya puede practicar su actividad deportiva predilecta, aunque implique contacto físico. Por lo tanto, se acabaron las limitaciones a la hora de practicar cualquier tipo de deporte, incluidos los de contacto, los acuáticos y los de riesgo.
Antes de la intervención, al paciente se le realiza una primera consulta preoperatoria que incluye algunas pruebas, todas ellas rápidas y sencillas, para comprobar la idoneidad del candidato para someterse a una operación de la vista, así como el procedimiento quirúrgico más adecuado.
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