Los xantelasmas son pequeñas acumulaciones de grasa que se forman en la capa superficial y media de la piel del párpado superior o del párpado inferior, especialmente en la zona que se encuentra cerca del lagrimal. Suelen tener un color amarillento y, por lo general, no afectan a la órbita del ojo.
Los xantelasmas pueden estar presentes tanto en el párpado inferior como en el párpado superior y es habitual que surjan en los dos ojos a la vez (suelen ser bilaterales). Cuando aparecen en otras áreas de la piel fuera de las proximidades del ojo se denominan xantomas.
Es importante establecer una diferencia entre los xantelasmas y otro tipo de lesiones de la piel que pueden aparecer alrededor de los párpados, como los quistes o los siringomas.
No existe una sola causa asociada directamente a la aparición de un xantelasma. Son, por lo general, varias de ellas las que confluyen ante un diagnóstico de esta naturaleza.
Repasemos brevemente algunas de ellas:
Los xantelasmas no suelen provocar ningún tipo de síntoma, salvo las consecuencias puramente estéticas: en general, los pacientes con estas lesiones suelen tener aspecto de cansados.
Existen diferentes alternativas de tratamiento, que el médico recomendará al paciente en función de sus características personales. Además del tratamiento para la consecuencia estética de los xantelasmas, es importante conocer su causa y, en su caso, tratar el problema que los generó.
Es relativamente frecuente que los xantelasmas vuelvan a aparecer después de ser extirpados.
En los pacientes que tienen un nivel alto de colesterol en sangre se deben controlar estos valores, tanto para prevenir la aparición de los xantelasmas como por el riesgo cardiovascular que provocan.
En los pacientes en los que los xantelasmas surgen por una causa desconocida no existen medidas de prevención posibles.
En el 50% de los casos, la aparición de xantelasmas se asocia a niveles de colesterol en sangre altos en pacientes que tienen hipercolesterolemia familiar. El otro 50% son de causa desconocida.
Cuando un paciente sospecha de la presencia de un xantelasma debe acudir de inmediato a un médico oftalmólogo. La subespecialidad de la oftalmología que trata este tipo de problemas es la cirugía plástica ocular.
Los xantelasmas suelen aparecer de forma totalmente indolora y sus síntomas son exclusivamente estéticos.
Una de las zonas de la piel de la cara en donde más se materializa la acumulación de grasa son párpados, que, recordemos, se caracterizan por estar conformados por un tejido hasta 10 veces más fino que la piel del resto de zonas de la cara.
A la hora de llevar a cabo los procesos de diagnóstico y tratamiento de esta anomalía debemos tener en cuenta lo siguiente:
Habitualmente después de la extirpación del xantelasma no suele requerirse un estudio anatomo-patológico del tejido, aunque en determinados casos sí se realiza una biopsia para determinar si se trataba o no de una acumulación de grasa.
Desafortunadamente, el nivel de recurrencia de reaparición de los xantelasmas es bastante elevado, incluso si los niveles de colesterol del paciente son normales.
Si el xantelasma vuelve a aparecer, será necesario un nuevo tratamiento para eliminarlo.